Entradas

Mostrando las entradas de diciembre, 2009
Imagen
Invitada al Blog: Ines Manzano UN LLAMADO DE ACCIÓN En Copenhagen se esperaba 192 países firmen un acuerdo vinculante con 4 componentes: 1) continuación del Protocolo de Kyoto o uno nuevo que lo suplante, luego del 2012; 2) no sobrepasar 2ºC y mantener el nivel del C02 en 350 ppm -partículas por millón-; 3) pagar por conservar bosques a través del mecanismo REDD; y, 4) establecer montos de ayuda económica y transferir tecnología a países en vías de desarrollo, para mitigar y adaptarse al cambio climático. Distintos Jefes de Estado acudieron a la sesión plenaria. Shimon Peres, Presidente de Israel dijo, en un inusual discurso, “llamaría a mis vecinos, inclusive con los que no hemos alcanzado relaciones diplomáticas, para juntar manos y esfuerzos para salvar nuestra región. Los desacuerdos políticos no deberían evitar la cooperación ambiental. Las moléculas de carbono no tienen pasaporte. Los ríos no requieren de visa. La polución viaja a través de ellos. Todos nosotros –Judíos, Cristian

Huellas para la próxima década

Imagen
Publicado en Revista Vistazo El 2009 recoge algunos hitos importantes de rescatar, no sólo por lo que significaron durante el año que pasó, sino porque sirven para mirarnos de aquí a diez años más. El 2009 podría pasar como el año de la resistencia a la debacle económica que empezó en 2008. Fue en ese sentido un año de pocos avances y grandes retrocesos. Sin duda también fue el año de Obama, pero además fue particularmente un año que estuvo marcado por ideas y manifestaciones culturales que si bien no todas tuvieron el eco que nos habría gustado escuchar dentro de nuestra sociedad ecuatoriana, al menos nos hicieron un guiño lo suficientemente tentador como para no dejarlas pasar tan fácilmente. La huella Darwiniana: Darwin está de moda, cumple 200 años, no tiene más conflictos con la Biblia, se pasea por el mundo entero, inspira miles de libros. Así es como enfrentamos este año lo que para algunos es “la idea mejor pensada” (por sobre Newton y Einstein). Y es que su revolución vino a r