Lo que Harvard no logro y escuelas Montessori si

La semana pasada se publicó en el Mercurio un artículo sobre el pasado que comparten Larry Page, Sergey Brin (Google), Jeff Bezos (Amazon) y Jimmy Wales (Wikipedia). Todos ellos coincidentemente han tenido una educación en colegios con método Montessori a los cuales atribuyen parte de su éxito personal.

Mi primaria también fue con este método, era la época en que las monjas asuncionistas de Guayaquil traían pedagogías de vanguardia y su foco era el de educar a lideres del futuro. Lamentablemente las mismas monjas se despistaron con el tema de la revolución social de la iglesia en América L. y entonces no le quedó otro camino a mi madre que cambiarme de colegio.

Pero las marcas de la educación quedan y hace mas de 4 años estoy vinculada directamente con este método mediante el jardín infantil (kinder le dicen en Ecuador) al que mis hijas van desde que aprenden a caminar (aunque obviamente los aceptan antes).

Más allá de rescatar las bondades de este método en particular, me parece importante señalar que en un momento en el cual la educación de calidad está más cuestionada que nunca alrededor de nuestro continente y que el pagar mas por un colegio, simplemente asegura “ciertos” resultados mejores que los de la media (pero nada sorprendente si lo comparamos con países que invierten lo mismo que nosotros y obtienen resultados 5 veces mejor), es en este momento en el cual una educación que libere, que permita crear, que estructure y ordene, pero que no encierre y limite, es lo que debemos promover.

En concreto, el enfoque educativo Montessori se trata de:

1.Cada alumno va aprendiendo las materias de acuerdo con sus intereses y su ritmo, con la guía del profesor: es decir el educador no es un “sabelotodo” sino en esencia un facilitador del proceso.

2. No todos los bancos miran hacia el pizarrón, y los escolares van cambiando de lugar de acuerdo a su actividad: hay zonas de estudio en donde van rotando.

3. Alumnos de distintos cursos (de dos a tres años de diferencia) comparten la misma sala de clases.

4. Las clases se realizan en ambientes preparados, que pueden ir desde una biblioteca, el jardín, hasta una cocina: hay actividades de vida practica como el limpiar, pero también de desarrollo de distintas destrezas.

Educar es el futuro.... si, pero para que sea un futuro que transforme y renueve, debemos mirar a los proceso educativos con mas pasión y compromiso, mal que mal nos pasamos 15 años o mas dentro de instituciones que nos “educan” pero no necesariamente nos transforman.