La calidad de nuestro emprendimiento
EL UNIVERSO, 16-04- 2013
Sin duda las cifras entregadas por el reporte GEM del 2013 sobre emprendimiento en el país son alentadoras, en donde uno de cada cuatro ecuatorianos es emprendedor. Son buenas noticias para nuestro desarrollo si lo vemos en la perspectiva de que la mayoría emprende porque siente que el entorno le permite avanzar con mayor seguridad y que de cierta forma la estabilidad económica del país les facilita el proceso. Sólo para reafirmar esto, el 58% considera que en el país hay buenas condiciones para emprender un negocio en los próximos seis meses. Si consideramos además que el 54% de ese grupo son mujeres esto representa un aspecto aún más positivo, en la medida en que dicha capacidad de emprender no estaría limitada por el género, sino al contrario de lo que se espera en la región, en donde la mayoría suelen ser hombres.
El carácter emprendedor de una sociedad como la ecuatoriana no es algo que cambie permanentemente, sin embargo el fortalecimiento de las percepciones positivas manifiesta de cierta forma el ambiente que perciben en general. Por ejemplo, en el Ecuador, las actitudes hacia el emprendimiento y los emprendedores son favorables, alrededor del 88% de la población afirma que emprender es una buena opción de carrera y el 84% consideran que los medios dan amplia cobertura a temas relacionados (según los datos del estudio)
Sin embargo, cuando nos detenemos en el tipo de emprendimiento y las razones para emprender que tienen los Ecuatorianos, podremos observar que en su mayoría se debe al denominado emprendimiento por necesidad, factor que se gatilla principalmente por la mala calidad de los trabajos y de oportunidades laborales en general. Esto adquiere amplia relevancia porque no todos los emprendimientos surgen, se desarrollan y consolidan, con la misma fuerza y valor al desarrollo país. Como menciona el estudio, esto representa "una aparente inconsistencia con el incremento sostenido del emprendimiento por necesidad experimentado en el ecuador en los últimos años. Una posible explicación para este fenómeno podría fundamentarse en un deterioro del nivel de vida de las personas que no lograron llegar a un nivel de pleno empleo, incentivándolos así́ a un emprendimiento por necesidad". Comparado con países como Chile, en donde la mayoría de sus emprendimiento se han generado por "oportunidades" y no por "necesidades", esto al final del día, genera una cultura innovadora para abordar esas oportunidades detectadas. En términos educacionales esta diferencia entre quienes emprenden por necesidad y por oportunidad se ve reflejada claramente en el nivel educativo de los emprendedores, así pues en Ecuador a mayor nivel educativo (fin de la secundaria y universidad) mayor el porcentaje de emprendedores por oportunidad.
Las oportunidades para seguir avanzando en la generación de emprendimientos que agreguen dinamismo e innovación al país van a estar íntimamente ligadas a la capacidad de acceder a financiamiento tanto estatal como privado, así como a las políticas claras y ágiles que faciliten estas actividades (como por ejemplo demorar cada vez menos en abrir una empresa), junto con el esfuerzo educativo desde las universidades, pero también desde educación temprana en los colegios. Debemos impulsar la innovación de manera transversal y para ello tanto el Estado como los privados deben confiar aun mas en lo vital que es apoyar a los emprendedores de manera temprana, sola así podremos alcanzar los niveles que esperamos de desarrollo.
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Sin duda las cifras entregadas por el reporte GEM del 2013 sobre emprendimiento en el país son alentadoras, en donde uno de cada cuatro ecuatorianos es emprendedor. Son buenas noticias para nuestro desarrollo si lo vemos en la perspectiva de que la mayoría emprende porque siente que el entorno le permite avanzar con mayor seguridad y que de cierta forma la estabilidad económica del país les facilita el proceso. Sólo para reafirmar esto, el 58% considera que en el país hay buenas condiciones para emprender un negocio en los próximos seis meses. Si consideramos además que el 54% de ese grupo son mujeres esto representa un aspecto aún más positivo, en la medida en que dicha capacidad de emprender no estaría limitada por el género, sino al contrario de lo que se espera en la región, en donde la mayoría suelen ser hombres.El carácter emprendedor de una sociedad como la ecuatoriana no es algo que cambie permanentemente, sin embargo el fortalecimiento de las percepciones positivas manifiesta de cierta forma el ambiente que perciben en general. Por ejemplo, en el Ecuador, las actitudes hacia el emprendimiento y los emprendedores son favorables, alrededor del 88% de la población afirma que emprender es una buena opción de carrera y el 84% consideran que los medios dan amplia cobertura a temas relacionados (según los datos del estudio)
Sin embargo, cuando nos detenemos en el tipo de emprendimiento y las razones para emprender que tienen los Ecuatorianos, podremos observar que en su mayoría se debe al denominado emprendimiento por necesidad, factor que se gatilla principalmente por la mala calidad de los trabajos y de oportunidades laborales en general. Esto adquiere amplia relevancia porque no todos los emprendimientos surgen, se desarrollan y consolidan, con la misma fuerza y valor al desarrollo país. Como menciona el estudio, esto representa "una aparente inconsistencia con el incremento sostenido del emprendimiento por necesidad experimentado en el ecuador en los últimos años. Una posible explicación para este fenómeno podría fundamentarse en un deterioro del nivel de vida de las personas que no lograron llegar a un nivel de pleno empleo, incentivándolos así́ a un emprendimiento por necesidad". Comparado con países como Chile, en donde la mayoría de sus emprendimiento se han generado por "oportunidades" y no por "necesidades", esto al final del día, genera una cultura innovadora para abordar esas oportunidades detectadas. En términos educacionales esta diferencia entre quienes emprenden por necesidad y por oportunidad se ve reflejada claramente en el nivel educativo de los emprendedores, así pues en Ecuador a mayor nivel educativo (fin de la secundaria y universidad) mayor el porcentaje de emprendedores por oportunidad.
Las oportunidades para seguir avanzando en la generación de emprendimientos que agreguen dinamismo e innovación al país van a estar íntimamente ligadas a la capacidad de acceder a financiamiento tanto estatal como privado, así como a las políticas claras y ágiles que faciliten estas actividades (como por ejemplo demorar cada vez menos en abrir una empresa), junto con el esfuerzo educativo desde las universidades, pero también desde educación temprana en los colegios. Debemos impulsar la innovación de manera transversal y para ello tanto el Estado como los privados deben confiar aun mas en lo vital que es apoyar a los emprendedores de manera temprana, sola así podremos alcanzar los niveles que esperamos de desarrollo.
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